29/09/2021
Corteva y ALAS han otorgado uno de los premios a Julián García Vega y María Sierra por Tierra de Pistachos, en Guadix (Granada), una iniciativa de jóvenes que volvieron a sus raíces rurales innovando en su explotación con el cultivo del pistacho, a través de un reconocimiento por parte de los agricultores en la zona al adaptar exitosamente variedades tardías al suelo y clima, mientras producen plantas jóvenes en vivero para suministrar al entorno.
Miguel Ángel López García y Rubén Morán han recibido otro de los galardones por su proyecto Baltor, ubicado en Santa María de la Isla (León) y Riolobos (Cáceres). Dos jóvenes pilotos que han devuelto a sus familias el arraigo al campo y que con su actividad combinan las nuevas tecnologías mediante el uso de drones con la aeronáutica.
Rafael Muñoz Rubio ha sido el encargado de recibir otro de los premios por su iniciativa Experiencia MIO1898, en Pozoblanco (Córdoba). Este veterinario diversifica diversos recursos de la ganadería extensiva, el olivar y agroturismo, junto con un proyecto innovador que cierra el ciclo de producción de una variedad de cerdo ibérico 100% en peligro de extinción, la variedad Torbiscal.
En Concejo de las Regueras (Asturias), Lucía Velasco puso en marcha Vaqueiras siglo XXI, dedicado al rescate de la tradición trashumante de más de cuatro siglos, que protege e impulsa la biodiversidad, con la creación de una red de mujeres ganaderas asturianas, cuya conexión se realiza mediante el uso de redes sociales para el intercambio de todo tipo de información práctica en el desarrollo de su actividad ganadera en extensivo.
En Fasnia (Tenerife), Lydia Domínguez ha destacado por Aires del Apartadero, con el cultivo ecológico de mora y frambuesa a lo largo de más de 4.000 metros de extensión, un cultivo casi inédito hasta entonces en las Islas Canarias, acompañado de prácticas sostenibles con materiales biodegradables para su envasado.
Y, por último, Carolina Ramos (Lerma, Burgos) ha sido galardonada por su proyecto Innovación al servicio de una explotación familiar agraria. Esta joven agricultora perpetúa el legado agrario de sus antepasados. Y, gracias a su formación como ingeniera técnica agrícola, especializada en Calidad Alimentaria, ha adaptado el manejo de innovaciones tecnológicas como el uso de drones y otras herramientas propias de la agricultura de precisión, además del análisis de nuevas variedades vegetales, para aumentar la productividad y adaptar mejor sus cultivos a los efectos del cambio climático.
Los ganadores de cada uno de los 6 proyectos recibirán una dotación económica por valor de 7.500 €, así como la puesta en marcha de una campaña de difusión y visibilidad entre asociados de Alianza ALAS, instituciones, medios de comunicación y redes sociales.