La certificación Agricultura Regenerativa de AENOR conforme al modelo Epigen Healthy Bite reconoce la aplicación de un conjunto de buenas prácticas de cultivo y su contribución a mejorar la fertilidad y la salud de los suelos. Un suelo sano es la base para lograr un cultivo sano y obtener alimentos de máxima calidad y la agricultura regenerativa es un sistema que contribuye a ello. Los primeros certificados corresponden a 83 hectáreas de cultivo de tomate, lima, mandarina, sandía y arándano.
La certificación de AENOR evalúa ese conjunto de técnicas de cultivo que tienen como propósito incrementar la fertilidad del suelo, aumentar el microbioma nativo (bacterias, hongos, y demás microorganismos) del suelo y lograr un nuevo equilibrio en el ecosistema suelo-planta. Los auditores de AENOR evalúan la mejora continua del suelo en los cultivos de Keops Agro, Biosabor, Hortofrutícola Poli, Hortovillamanrique y Cuna de Platero mediante la toma de muestras en las parcelas de producción y el seguimiento de indicadores como el contenido de carbono en el suelo.
Keops Agro es una empresa almeriense especializada en la producción de tomate, pimiento, sandía y cítricos. Biosabor, ubicada junto al parque natural de Cabo de Gata, cuenta con 315 hectáreas donde cultiva producciones de tomate, calabacín, sandía y melón. Hortofrutícola Poli es una empresa familiar, la cuarta generación de agricultores y ganaderos de la comarca del Andévalo de Huelva que ha destinado más de 27 hectáreas de cítricos a la agricultura regenerativa. Hortovillamanrique, cooperativa situada en el municipio sevillano de Villamanrique de la Condesa, está especializada en la producción de sandías y melones, y Cuna de Platero, cooperativa ubicada en el municipio onubense de Moguer, que cuenta con 900 hectáreas de cultivo de fresa, frambuesa y arándanos.