Durante el pasado año, el consumo total de alimentos y bebidas en España -dentro y fuera del hogar- se mantuvo en 30.668 millones de kilos/litros, apenas un 0,2% menos que en 2023. El gasto total ascendió a 119.667 millones de euros, un 2,4% más que el año anterior, lo que equivale a 2.797 euros por persona.
Aunque continúa al alza, el ritmo de crecimiento del gasto se ha atenuado. En 2023 los españoles gastaron un 7,5% más que el año anterior en la compra de alimentos y bebidas, según el informe de consumo. Ese año la inflación de los alimentos se situó en el 7,3%.
Además, según el ministro, los nuevos hábitos de consumo y la planificación en 2024 han impulsado una compra más consciente, sostenible y eficaz frente al desperdicio alimentario.
Los hogares concentran el 87,5% del volumen total de consumo, con 26.823 millones de kilos/litros, y un gasto de 83.795 millones de euros, un 2,6% más que el año anterior, a pesar de una ligera caída del 0,2 % en volumen. El consumo per cápita se situó en 572 kg/l, lo que supone 8,5 kg/l menos que en 2023.
El binomio alimentación y salud guía las compras de los hogares españoles, con un consumo diario habitual de lácteos, frutas y hortalizas. Los consumidores de menos de 35 años prefieren alimentos fáciles y rápidos de preparar, como legumbres cocidas, al mismo tiempo que mantienen un consumo habitual de productos frescos, lo que refleja un equilibrio entre salud, sostenibilidad y funcionalidad. Sus patrones de consumo tienden a identificarse con la dieta mediterránea. La proximidad impulsa al supermercado como canal principal de compra, con un 67,2% del volumen total.
Fuera del hogar, el consumo se mantiene estable (-0,2% en volumen), aunque el gasto sube un 1,9%, hasta alcanzar los 1.010 euros por persona.